Todos hemos pasado, más tarde o más temprano, por momentos difíciles en nuestras vidas. Momentos  en los que todo parece derrumbarse y resulta complejo visualizar una salida fácilmente. Lo que diferencia a quienes logran atravesar estas situaciones, manteniéndose en pie y seguir adelante frente a la adversidad, es un conjunto de hábitos que se centran en la resiliencia.

La resiliencia es la capacidad de enfrentarse a la adversidad y reconstruirse habiendo enfrentado circunstancias difíciles. Esta relacionada con nuestro poder interior de tomar las situaciones difíciles como oportunidades para el desarrollo personal.

El miedo, por ejemplo, es una emoción considerada negativa, la cual suele surgir en momentos adversos, pero dicho miedo podrida verse también como una oportunidad para aprender y desarrollarse. Aprende más sobre como poner el miedo a tu favor aquí. 

«He sido un hombre afortunado en la vida..nada me ha sido fácil». Sigmund Freud.

La neurociencia ha aportado fundamentos científicos que confirman su existencia. Se ha demostrado que el cerebro humano tiene la capacidad de adaptarse a los cambios mediante lo que se conoce como neuroplasticidad.

La neuroplasticidad permite a las neuronas regenerarse tanto anatómica como funcionalmente y formar nuevas conexiones sinápticas. La plasticidad neuronal representa la facultad del cerebro para recuperarse y reestructurarse. Este potencial adaptativo del sistema nervioso permite al cerebro reponerse a trastornos o lesiones. (Fuente: https://www.cognifit.com/es/plasticidad-cerebral)

Cuatro hábitos básicos de las personas que desarrollan resiliencia

1. Mantenerse conectados con las emociones

Las personas que desarrollan resiliencia están conectadas con sus emociones, las perciben, las entienden y saben como manejarlas.

Esto está directamente ligado al desarrollo de la inteligencia emocional. Dicha inteligencia se puede definir como la habilidad de reconocer, entender y gestionar nuestras emociones, así como las emociones de quienes nos rodean. Ingresa aquí para conocer más sobre Inteligencia emocional y como desarrollarla.

Hay quienes dicen que que suprimir las emociones es el mejor camino cuando estás atravesando por tiempos difíciles, pero es justo lo contrario: suprimir tus emociones puede ser contraproducente. La resiliencia permite que estemos más conectados y conscientes de nuestras emociones, brindándonos mayor control.

2. Quienes desarrollan resiliencia no escuchan «las voces negativas en su cabeza»

Las personas resilientes tienen la capacidad de observar sus pensamientos, su dialogo interior y tomar aquello que sea negativo simplemente como información, para luego cavar mas profundo para poder encontrar lo que lo está provocando.

La resiliencia nos da la posibilidad de sentirnos optimistas aún ante situaciones adversas. Es así como las personas resilientes no se detienen ante el problema sino que se abren a la búsqueda de soluciones.

3. Conocen su fortaleza

La resiliencia es una cualidad que todos podemos desarrollar.

Observar y traer al presente en nuestra memoria aquellas situaciones que hemos logrado superar nos permite fortalecernos y confirmar que es posible recuperarse ante la adversidad.

 «Las personas resilientes saben cómo recuperarse y no permitirán que las dificultades de la vida los empujen hacia abajo». 

Historia de Resiliencia

Aron Ralston, un joven de 27 años que en el  2003 se encontraba escalando el cañón Blue John, en Utah, cuando una roca cayo sobre su brazo, dejándolo atrapado. Ante esta situación límite optó por amputarse el mismo para poder sobrevivir. Dos años después continuo escalando, convirtiéndose en la primera persona en escalar los 59  picos llamados «Colorado ‘fourteeners». (Fuente:http://blogdelamente.com/resiliencia/)

Si quieres conocer más historias aquí te dejamos el enlace a una iniciativa generada este año con el objetivo de acercar a la sociedad española el concepto de resiliencia. La campaña buscó 100 ejemplos de resiliencia aportados por la ciudadanía desde su propia cotidianeidad. www.100ejemplosderesiliencia.org

4. No buscan controlar todo

Las personas resilientes no buscan tener todo bajo control. Saben cómo adaptarse a las circunstancias externas. Tienen presente que lo único que pueden hacer es enfocarse en lo que está dentro de su esfera de control – su propia actitud, sus propias emociones, su propio comportamiento- y actúan sobre esto para encontrar soluciones y alcanzar sus objetivos.

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Generar estos hábitos lleva tiempo y práctica pero sin dudas es posible desarrollar la resiliencia. Sobre todo debemos estar dispuestos a cambiar aquellos aspectos que no nos apoyan en nuestra vida, especialmente en ocasiones adversas, para así hacer la diferencia en nuestra realidad y en la de quienes nos rodean. En ti está la decisión. Te dejamos este vídeo para comenzar a visualizar que el cambio es posible.

 “Voy a hacer un cambio, por una vez en mi vida, voy a sentirme realmente bien,

voy a marcar una diferencia, lo voy  a hacer bien.

Ningún mensaje puede ser mas claro:

Si quieres hacer del mundo un lugar mejor

date una mirada y cambia.

Estoy empezando por el hombre en el espejo”

 “The man in the mirror” Michael Jackson.

Basado en texto de: http://www.inc.com/
Imágenes cortesía de: http://tinybuddha.com/blog/3-tips-letting-go-control-relaxing-flow/, http://www.infosalus.com/, https://www.pinterest.com, http://pensamientospoderosos111.blogspot.com.uy/