Cambiar no es algo simple. No estoy diciendo que no pueda ser rápido, porque a veces lo es. De hecho, cambiar siempre es rápido, es automático. La dificultad radica en tener el método para que la persona consiga encontrar la creencia adecuada, aquella que realmente puede asumir como válida, y que desea incorporar en su sistema de valores y creencias; sustituyendo a otra que hasta ahora le estaba limitando o perjudicando.
[Tweet «no se puede enseñar una creencia, no es algo pasivo,la persona debe aceptarla en su interior»]
Y las palabras claves son Asumir y Creer. ¿Te resulta sencillo asumir una nueva creencia? ¿Aceptas algo que toda tu vida no has creído posible tan sólo porque alguien te lo diga? Por supuesto que, en lineas generales, NO. Sí que lo hemos hecho mucho, sobre todo en nuestra infancia, cuando alguien que ejercía un gran poder de liderazgo en nosotros, o dicho de otro modo, al que nosotros, de forma voluntaria se lo habíamos permitido por ser grandes referentes en nuestras vidas (nuestros padres, un profesor determinado…etc). También lo hemos hecho por pura repetición.. cuando muchas personas diferentes nos han repetido lo mismo… en bastantes ocasiones hemos acabado «comprando» esa opinión hasta hacerla nuestra en lo más profundo.
Ahora toca «reaprender» o «desaprender»… o simplemente.. aprender algo más acorde a quienes somos ahora. Y estas palabras no son vanas, pues no se puede enseñar una creencia, no es algo pasivo, es algo activo que debe surgir de la persona que debe aceptarla en su interior.
Cualquier terapia, cualquier método de cambio personal, cualquier herramienta que busque el avance personal y la eliminación de barreras se basa en esto, su éxito depende de la capacidad para generar un contexto donde la persona consiga cambiar sus creencias.
Por eso no bastan los consejos, no basta lo que esos oradores repiten y repiten, por eso no basta decirte a ti mismo «sí, voy a bajar de peso»…si no hay razones y creencias lo suficientemente poderosas que acompañen ese cambio, no tendrá ningún efecto.
Cambiar, cambiar «de verdad» es tan rápido como tú estés dispuesto a entender que lo que crees hasta este momento te ha llevado a esa realidad, y tan efectivo como la profundidad con la que consigas en el proceso de cambio incorporar nuevas creencias personales que impulsen el cambio. Sin duda, algo demasiado complejo como para dejar en manos de aficionados. Es tu vida.
Luis Gil – Inspira y Avanza.
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