Estamos habituados a ver el lado negativo de las cosas. Si te centras en lo positivo, a veces eres tildado de «iluso» por aquellos pesimistas que se dicen ellos mismos «realistas». No podemos dejarnos llevar por esos comentarios, pues todos llevamos dentro una parte de nosotros que también es crítica y negativa.
Hoy os dejo este bonito cuento indio que deja bien claro la manera de entender esas dos polaridades:
– Una noche un anciano indio Cherokee le contó a su nieto la historia de una batalla que tiene lugar en el interior de cada persona. Le dijo: “Dentro de cada uno de nosotros hay una dura batalla entre dos lobos. Uno de ellos es un lobo malvado, violento, lleno de ira y agresividad. El otro es todo bondad, amor, alegría y compasión”. El nieto se quedó unos minutos pensando sobre lo que le había contado su abuelo y finalmente le preguntó: “Dime abuelo, ¿Cúal de los dos lobos ganará?”.Y el anciano indio respondió: “Aquél al que tu alimentes”.
Ahora debemos tener en cuenta que los días «normales» son aquellos donde más necesidad tenemos de poner consciencia en el lobo que alimentamos, porque en los días «buenos» el lobo bondadoso y alegre ya se alimenta sólo, y en los días «malos» el lobo malvado toma su espacio, porque está ahí y debemos saberlo y aceptarlo, y también se alimenta. La clave son aquellos días frecuentes, normales, ni buenos ni malos… ahí es donde ambas puertas están entreabiertas y tenemos toda la capacidad de cerrar una… y liberar otra.
¿Eres consciente del lobo que alimentas en los días normales?
Feliz semana
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